En el mercado encontraremos una gran variedad de cintas de pintar, también conocidas como cinta de carrocero, de diferentes anchuras y con distintos grosores, de manera que tendremos que elegir el modelo que mejor se adapte a nuestras necesidades dependiendo de la superficie que tengas, utilizaremos unas u otras.
Con estas cintas de papel, conseguiremos dar color a una superficie de una forma más fácil y rápida, ya que no tendremos que estar pendientes de salirnos de los bordes ni de pintar zonas que no deseamos.
La cinta de carrocero universal, por ejemplo, nos permite proteger bordes rectos en superficies lisas y es apta para cualquier tipo de pintura.
Para formas curvas y contornos irregulares, existe una cinta más flexible que se ajusta fácilmente a superficies tanto lisas como rugosas. Es muy importante estirar bien la cinta antes de colocarla
Cuando vayamos a trabajar en superficies delicadas o en empapelados podemos decantarnos por una cinta de pintar más fina y de menor adhesión. Así, al despegar la cinta evitaremos dañar el revestimiento.
Este otro modelo de cinta, que soporta perfectamente los rayos UVA y las inclemencias del tiempo, es idónea para pegarla sobre piedra y cristal, tanto en exteriores como interiores.
Con estas cintas de papel, conseguiremos dar color a una superficie de una forma más fácil y rápida, ya que no tendremos que estar pendientes de salirnos de los bordes ni de pintar zonas que no deseamos.